El interiorismo para las oficinas de Grupo López Guillén toma forma en su nuevo edificio situado en el puerto de Almería. Un contenedor neutro con toques de color que mira al mar Mediterráneo y materializa la esencia de su corporación.
LOCALIZACIÓN | Puerto de Almería
SUPERFICIE | 685 m²
CATEGORÍA | diseño de interiores, diseño interior, interiorismo, oficina, diseño de oficina, diseño de oficina Almería, oficina corporativa, diseño gráfico, aplicación de marca, branding espacial, diseño corporativo, diseño integral, reforma integral
En esta ocasión, se desarrolla un diseño de oficina en Almería. Inserto en pleno puerto de la ciudad, el nuevo edificio del Grupo López Guillén cohesiona espacios de trabajo para sus dos empresas: SALG y CAPA.
La localización privilegiada aporta luminosidad a los espacios de trabajo, además de unas vistas a la amplitud del mar Mediterráneo.
La presencia del edificio en el puerto requería de la visibilidad en su entorno, tanto desde dentro del puerto, como desde el acceso de la ciudad. Mediante una solución SATE de fachada, el acabado se ha elegido en base a la identidad corporativa del grupo. Además, se genera un ritmo en las franjas opacas que se consigue mediante la iluminación indirecta, proveniente de unos perfiles verticales pintados en el mismo color.
Con la vista puesta en la expansión internacional, Grupo López Guillén cuenta con más de 100 años de trayectoria. Transcurso de tiempo en el que han podido convertirse en referentes a nivel nacional.
La labor de Filbak fue hacer del edificio un espacio a la altura de una corporación, que fuese reflejo de la marca del grupo. Se busca una distribución diáfana de base neutra, sobre la que destacan toques de color.
Para conseguir esto, la estrategia fue dejar a las marcas SALG y CAPA aparecer como neutrales en color blanco. Así, la paleta de colores y los grafismos utilizados nacen de la marca del Grupo López Guillén, focalizando el branding espacial en representar al grupo principalmente.
Por otro lado, el color aparece en el interiorismo, donde cada sala de reuniones tiene asignado un color. Ese color se consigue con materiales propios de la marca CAPA, dedicada a la producción y comercialización de morteros. De esta forma, se consigue trasladar la imagen de marca al espacio en un nuevo proyecto de branding espacial.
Cada material aparece aplicado en una de las paredes, haciéndola protagonista. Así el conjunto de salas de reuniones del edificio genera una especie de showroom XL de la marca.
Otro punto en el que el color destaca sobre la neutralidad del conjunto, son los tres phoneboxes realizados para ofrecer ese plus de privacidad a los trabajadores y trabajar en su interior. Tres cabinas anexas a un espacio de trabajo abierto, acondicionadas acústicamente.
Por último, para este diseño de oficina en Almería, fue importante tomar en cuenta las características de mobiliario a implantar. Este debía con cumplir con requisitos de funcionalidad e integrarse en la neutralidad del conjunto.
En general, la amplitud del entorno exterior se adentra en un interior en el que destacan las transparencias y los espacios abiertos. Un edificio que refleja una identidad de marca inserta en un ambiente luminoso.
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